La pandemia de la COVID-19 ha supuesto un cambio trascendental en muchos aspectos de la sociedad, sobre todo, ha cambiado los hábitos de consumo de los usuarios. De hecho, las restricciones y los confinamientos han fomentado nuevas técnicas de consumo como el e-commerce.
A nivel profesional, ha acelerado la transformación digital, obligando a muchas empresas a instaurar prácticas como el teletrabajo o a empezar a utilizar herramientas de marketing y gestión de redes sociales. Por todo esto, en 2022 se espera que sucedan nuevos cambios o se asienten muchos de los que ya han ido irrumpiendo en el sector del marketing digital.
La calidad por encima de la cantidad
¿Sabías qué a partir de ahora Google premia los contenidos con mayor análisis, extensión, profundidad y creado por expertos reconocidos? Tras la actualización algorítmica que lanzó en 2020, adquirieron mucha importancia tres términos que configuran Google EAT a día de hoy: Expertise (experiencia), Authoritativeness (autoridad) y Trustworthiness (confianza).
Por lo tanto, para que una página web reciba el mayor tráfico posible, primero, los contenidos deben estar redactados y firmados por expertos; segundo, la web debe tener autoridad en cuanto a enlaces utilizados, reputación, años en la red, webs de organizaciones oficiales y reconocidas e incluidas; y tercero, tener una web totalmente segura, con contenido de alta calidad y veraz, legal y actualizada.
Mayor personalización del contenido
Es una tendencia que lleva tiempo instaurada pero que se ha acrecentado con la irrupción de un mayor número de empresas en el mundo digital. Ahora, la oferta es mayor porque el número de productos y servicios que se pueden adquirir por internet ha crecido tras el estallido de la COVID-19. De hecho, 1 de cada 4 empresas españolas venden, a día de hoy, sus productos por internet según, el Instituto Nacional de Estadística (INE). Tomando esta premisa, las compañías necesitan personalizar lo mayor posible el contenido que ofrecen, así como sus secciones y ofertas para conseguir captar usuarios online.
Usuarios cada vez más celosos de su privacidad
Para la personalización, es fundamental la recogida de datos de los usuarios que visitan nuestro site. Sin embargo, los consumidores son cada vez más conscientes de la importancia de la privacidad a la hora de navegar por internet y de cómo se queda grabada la huella digital. Por ello, las empresas deberán encontrar fórmulas para recoger los datos que necesiten para personalizar su contenido y, a la vez, preservar la privacidad de los visitantes y sin usar datos de terceros.
En este sentido se ha vuelto a pronunciar el gigante tecnológico con la eliminación del soporte para las cookies de terceros. La principal consecuencia es que los profesionales del marketing deberán buscar herramientas y técnicas alternativas para seguir midiendo nuestros gustos sin comprometer la privacidad de los usuarios como, por ejemplo, el Privacy Sandbox de Google o tecnologías como FLoC.
Especializarse, la clave del éxito
Las necesidades tecnológicas que están teniendo las empresas demandan profesionales cada vez más formados y especializados en la materia, que conozcan que exactitud las herramientas y técnicas de marketing digital, para que las empresas en las que trabajan estén a la vanguardia del sector.
En este sentido, la Universidad Loyola cuenta con un Diploma de Especialización en Marketing Digital, con un plan de estudios adaptado a las novedades que van surgiendo en el sector. “A través del enfoque práctico del programa, en cada asignatura se desarrollan tanto las habilidades técnicas y específicas de cada área, como las competencias más transversales y blandas necesarias para el crecimiento profesional del alumnado”, explica Andrés del Toro, director del Diploma.
El programa parte de una visión más global y estratégica, para posteriormente centrarse en aspectos concretos a través de las distintas asignaturas: medios sociales, gestión web, analítica, SEO, todo tipo de publicidad digital, CRM, emailmarketing, automatización, inteligencia de negocio, etc. Esto se completa con formación en comercio electrónico, en negocios digitales e incluso en emprendimiento, con el propósito de dar una visión aún más completa de las posibilidades del entorno digital.
