Marcos Zamora Herranz, director general en Autismo Sevilla, ha estado con los estudiantes del Máster Universitario en Atención Temprana para impartir una sesión sobre “Procesos de intervención”.
Psicólogo sanitario, especializado en neuropsicología y trastorno del espectro del autismo (TEA), lleva más de 20 años aprendiendo sobre autismo y ha centrado su actividad en la evaluación y diagnóstico de personas en el espectro del autismo. Para Marcos, la detección precoz es crítica en los casos de TEA, es la puerta para un adecuado diagnóstico y, en paralelo, el comienzo de la Atención Temprana.
“Cuanto antes se inicie este proceso de detección, antes comenzará la Atención Temprana. Se aprovecharán la capacidad del cerebro de los niños para generar cambios significativos como consecuencia de la intervención y la estimulación, previniendo que se amplíe la desviación del desarrollo normotípico en cuanto a habilidades sociales y comunicativas, que permitan a los menores participar socialmente de forma efectiva”, confirma.
Los avances conseguidos con una Atención Temprana cada vez más precoz han significado cambios trascendentales en la evolución de muchos menores con autismo. La Atención Temprana tiene un impacto en el desarrollo de los menores porque se trabaja desde una triple vertiente: por un lado, por la estimulación que los profesionales especializados realizan de forma directa; por otro, empoderamiento y capacitación de las familias para que sean ellas quienes pueden generar contextos de desarrollo y aprendizaje; y, por último, constante colaboración con todos los entornos de los menores.
“Dar herramientas a las familias desde los primeros momentos implica reducir el impacto que el diagnóstico tiene en el entorno familiar, y aumenta la calidad de vida familiar”.
La formación, fundamental en el ámbito de la Atención Temprana
“Los profesionales de Atención Temprana han tenido que ir adaptando su formación y su rol a lo largo de los últimos años para adaptarse a los cambios de paradigma y a las crecientes evidencias sobre modelos con mayor impacto en la vida de los menores y sus familias”, explica Marcos.
Para hacer frente al tratamiento y abordaje del TEA es fundamental una adecuada formación especializada de las herramientas y de las metodologías de apoyo e intervención con los menores con TEA, centrándose en los aspectos socio-comunicativos y hacer más flexibles su pensamiento y su conducta. Por ello, Marcos recomienda a los estudiantes tener un profundo conocimiento de cómo se manifiesta en autismo, y una experiencia suficiente para adaptar ese conocimiento a la realidad individual de cada persona.
“Conocer las herramientas y metodologías que están avaladas por la evidencia científica, no sólo es una necesidad, sino una responsabilidad ética como profesionales a la hora de dar la mejor respuesta a los niños y las niñas y sus familias”.
Además, destaca la importancia de empoderar y capacitar a la familia. Para ello, profesionales deben trabajar de forma colaborativa con ellas, partiendo de las necesidades percibidas por las familias y dando herramientas para que sean ellos quien puedan guiar el desarrollo de sus hijos e hijas en todos los contextos.
El Máster Universitario en Atención Temprana te prepara para la atención y desarrollo de la población infantil de entre 0 y 6 años a través de un claustro multidisciplinar del ámbito sanitario, educativo y social. Está formados por profesores y profesionales seleccionados de la Universidad y de la Orden Hospitalaria de los Hermanos de San Juan de Dios.
