“El equipo docente nos transmitió la utilidad y la pasión por la mediación, que tantos beneficios tiene para la sociedad y las empresas”

03/01/2022

Miriam Sepúlveda tiene una larga trayectoria profesional como abogada y mediadora, profesiones que desarrolla actualmente en el Grupo Morera&Vallejo. Llegó a Loyola Másteres, la escuela de Posgrado de la Universidad Loyola, gracias a una antigua compañera del Despacho ONTIER, quien le habló del Curso de Especialización en Mediación, dirigido por Javier Alés.

Tras su realización, considera que le ha supuesto un enorme enriquecimiento personal y profesional porque le enseñó a “enfocar su profesión de una forma mucho más rentable para los clientes”. Además, el curso le abrió las puertas en el sector como coordinadora del área de Mediación en Andalucía de ONTIER.

“Lo que más me gustó fue la diversidad de personas que integraron el curso, con edades y formaciones muy distintas: ingenieros, psicólogos, administradores de fincas, abogados, etc., unidos por un mismo interés, la mediación”, profundiza Miriam.

El curso está destinado a un amplio abanico de perfiles profesionales: desde recién licenciados que estén buscando su camino profesional, como trabajadores consolidados que quieran profundizar en las técnicas de negociación y resolución de conflictos, hasta personas que sean mediadores por naturaleza, porque van a poder profundizar en aquello que hacen de manera natural. “En mi opinión, la mediación ha llegado para quedarse, por lo que cualquier profesional puede tener una gran oportunidad si se forma y se especializa”, explica.

Miriam recuerda que se trata de una profesión cada vez más en auge, sobre todo, cuando se apruebe el Anteproyecto de Ley de Eficiencia Procesal, con el que se pretende dar un impulso a la Mediación. “Aunque está en trámite, cuenta con el apoyo del Gobierno, Colegios de Abogados y el Consejo General del Poder Judicial, por lo que todo apunta a que entrará en vigor próximamente”, aclara.

También destaca todos los conocimientos y herramientas adquiridas durante su formación en el curso de Especialización en Mediación, que hoy en día “trata de aplicarlos a todos los ámbitos que le rodean, desde el profesional hasta en el ámbito familiar, por simples disputas entre mis hijos”.

El principal reto al que se tiene que enfrentar un mediador es el educacional

La mediación es un método de solución extrajudicial de conflictos con una historia muy reciente en la sociedad. En Europa, el primer texto legislativo de mediación se aprobó en 1998, mientras que en España, el primer texto legal que regula este tema es la Ley de mediación en asuntos civiles y mercantiles, del año 2012.

Al tratarse de un método novedoso, es un desconocido para gran parte de la sociedad en general, y los abogados en particular. Miriam pone como ejemplo un caso que le ha ocurrido recientemente en el colegio de sus hijos: “una señora me contaba que a su hijo le habían nombrado mediador junto con otros dos compañeros de clase. La madre, que desconocía esta figura, llamó al colegio para informarse si aquello comprometía a su hijo, pues era algo que le preocupaba. Con esto quiero decir que, aunque los colegios están haciendo esfuerzos por integrar ese concepto desde pequeños, todavía queda mucho por hacer”.

Miriam finaliza reflexionando sobre la importancia de la educación y difusión de la mediación porque “una sociedad en la que la mayor parte de su población no conoce que es la mediación ni en qué consiste, difícilmente va a acudir a un mediador cuando tenga un conflicto”.

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